PROPUESTA ACADÉMICA
APRENDER A PROYECTAR PROYECTANDO
Encaramos el aprendizaje de la arquitectura y construcción de la ciudad real, reconocemos el compromiso con las deudas sociales y los desafíos ambientales.
Intentamos no caer en los tópicos y lugares comunes. Definimos principios y valores, fijamos prioridades, temáticas, rumbos y programas.
Trabajamos previendo datos, elaborando diagnósticos y apoyándonos en experiencias similares.
MARCO CONCEPTUAL
Proponemos una transformación de la docencia universitaria en la que el eje fundamental sea el aprendizaje.
Estimulamos a nuestros estudiantes para un tipo de “aprendizaje autónomo”.
Reconocemos como más relevante el dominio de las herramientas de aprendizaje que la acumulación de contenidos.
Lo más importante para la cátedra es que el estudiante pueda pensar con criterio propio y racionalidad, fomentar la investigación y la toma de decisiones.
Frente a cualquier problema de arquitectura, siempre hay múltiples respuestas correctas
El proceso de aprendizaje, dentro del taller vertical, se desarrolla en cada curso con complejidad ascendente. Es así que entendemos la necesidad de:
• Construir el taller vertical como ámbito de formación donde se trabaja la integración de los conocimientos, se reflexiona e intercambian las diferentes opiniones, propuestas, proyectos.
• Reunir todos los niveles en un sector elegido de la ciudad, con distintos grados de complejidad y ubicación en el tejido existente, de acuerdo a Normas Vigentes ó cambiándolas como otras formas de intervención.
• Pensamos que el taller vertical es el lugar donde se debe producir la síntesis de los conocimientos adquiridos en las distintas disciplinas de la carrera y trabajamos en ese sentido.
Estoy convencido que el mejor arquitecto que podemos formar será aquel que sea capaz de relacionar su producción arquitectónica con el mundo que lo rodea, aquel que pueda establecer el marco de referencia, sensibilizarse con él, en sus aspectos sociales, culturales, económicos y naturales, y responder con respeto, sencillez, creatividad y eficiencia.
En el taller de la FADU me siento parte de un pensamiento colectivo donde necesitamos observar precisa y perspicazmente para luego elaborar ideas construyendo desde el corazón con el fin de imaginarnos situaciones de la vida real y sentir compasión por el destino humano; solo así concebimos que se pueda tener un futuro en la Arquitectura.